Un BURRO y un remolque recorren la devastación de la Franja de Gaza, mientras aumentan las esperanzas de un alto el fuego.

Las sombrías escenas han provocado llamados internacionales para que Israel ceda y ahora ofrece una tregua de 40 días.

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Los funcionarios israelíes se están preparando para volar a la cash egipcia, El Cairo, para sellar el tan esperado acuerdo que permitiría a cambio la liberación de miles de prisioneros palestinos.

Pero el maestro terrorista de Hamás, Yahya Sinwar, aún no ha respondido a la oferta, calificada de “extraordinariamente generosa” por el secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken.

Un alto funcionario de Hamás también expresó esperanzas de un gran avance, declarando que el grupo terrorista no tenía “problemas importantes” con el plan de tregua más reciente.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se ha visto sometido a una enorme presión en medio de manifestaciones encabezadas por familias de rehenes que exigen un acuerdo inmediato.

Pero Sinwar, quien se cree que se esconde de las fuerzas israelíes que lo persiguen en el último bastión de Hamas en la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza, aún no ha aprobado los detalles.

Se entiende que el acuerdo sobre la mesa incluye una pausa de 40 días en los combates para permitir la liberación de rehenes e incrementar la ayuda a la franja costera bombardeada.

Israel también acordó considerar una segunda fase de una tregua que consistirá en un “período de calma sostenida” en respuesta a las demandas de Hamás de un alto el fuego permanente.

Pero el Primer Ministro Netanyahu -cuyas fuerzas se dice que han matado a 34.000 palestinos desde que los ataques terroristas del 7 de octubre mataron a 1.200 israelíes- subrayó que Rafah sería atacado independientemente de cualquier acuerdo.

Sinwar, que planeó las masacres, encabeza la lista de los más buscados de Israel.

Entre los rehenes que serán liberados por motivos humanitarios se encuentran las mujeres, los niños, los hombres mayores de 50 años y los enfermos que quedan.

El Ministro de Asuntos Exteriores británico, Lord Cameron, también describió la oferta de Israel como “generosa”.

Dijo: “Espero que Hamás acepte este acuerdo y, francamente, toda la presión del mundo y todos los ojos del mundo deberían estar puestos en ellos hoy diciendo ‘acepten ese acuerdo'”.